La portada de la discordia: ‘De sangre y cenizas’

¡Hola!

¿Cómo ha ido tu semana? Si has frecuentado bookstagram en los últimos días, sabrás de qué voy a hablar. Si no es la polémica de la semana, cerca está de serlo. Durante dos días no se habló de otra cosa. Y cómo no, tengo que dar mi opinión.

Por si no sabes de qué va la cosa, te pongo en contexto antes de empezar. A principios de semana, la editorial Puck anunciaba la portada y fecha de publicación de su novedad ‘De sangre y cenizas’ de Jennifer L. Armentrout. A partir de ahí, la mayoría de comentarios fueron negativos. La nueva portada era completamente distinta a la original, y eso no terminó de gustar a los fans.

Pero, ¿por qué se fue de las manos la polémica? ¡Descúbrelo!

¿Qué ha ocurrido?

Como ya te he explicado en la introducción, toda esta historia nace del anuncio de la editorial en redes sociales. La novedad es esperadísima, mucha gente ha leído ya el libro en inglés y está fascinada.

La portada que puedes ver arriba (en el centro) es la que la editorial anunció. Personalmente, no es mi estilo de portada favorito. También es cierto que, en la publicación de anuncio, la imagen no tenía una calidad extraordinaria como para apreciar la ilustración.

En pocos minutos, la publicación de Instagram se cargó de mensajes negativos en referencia a la portada. También se pedía un cambio de portada hacia la original (a la izquierda de la imagen superior).

Ante toda la polémica, la editorial emitió un comunicado anunciando que cambiaba la portada. La nueva (a la derecha) es muy parecida a la original, aunque difiere en algunos detalles. En el comunicado también pidió respeto por el trabajo que había realizado el equipo de la editorial. Pero, los fans habían expresado su opinión, ¿no?

El valor del trabajo de los demás

La cuestión no es esa. De hecho, la propia editorial destacó que agradecía el feedback a la portada. El problema son las formas.

En esa publicación, y a lo largo de la semana, se acumuló algún que otro mensaje constructivo e incluso positivos de la portada que, en un principio, iba a salir al mercado español. Sin embargo, en su mayoría fueron negativos. Y no solo con una opinión, sino que hubo ciertas personas a las que la situación les sobrepasó. Comentarios bastante fuera de lugar.

Reconozco que todos hemos criticado alguna vez una edición. Es así. Pero como digo, el problema son las formas. Hay que recordar que, detrás de esa portada, hay un equipo. Un ilustrador, gente de la editorial… Y también está bien recordar que los libros no se hacen en dos días. Así que esto de exigir un cambio de portada… como que no.

Además, en el comunicado de la editorial se dejada claro que la autora había aceptado la portada. Si la persona que lo ha escrito ha decidido que esa es una buena imagen para su producto, ¿a qué viene esa fiereza a la hora de hablar de la portada? En el derecho de cada uno está comprar la novela en esta edición o no, pero es innecesario tirar por tierra el trabajo de decenas de personas.

Recomiendo leer este hilo de Andrea Tomé en Twitter donde expresa su opinión sobre el tema desde el punto de vista de alguien que trabaja en una editorial.

Ya me parece fuerte que la editorial haya tenido que defender a parte de su equipo y pedir respeto para ellos. Pero todavía se dio un paso más cuando, a contrarreloj como ellos mismos confesaron, cambiaron la portada por lo que todos estaban reclamando, algo parecido a la original. Repito: una editorial cambió en tres días todo el trabajo realizado porque la gente se les tiró encima.

De verdad que entiendo que se debe escuchar la opinión del lector. Así como el lector tiene la posibilidad de opinar, siempre desde el respeto, sobre el producto que está consumido. Pero si me preguntas a mí, a título personal, no hubiese cedido. En primer lugar, por mantener el trabajo ya realizado; y, en segundo lugar, porque esto puede sentar las bases para otros lanzamientos. A partir de ahora, ¿si a los lectores no les gusta una portada, una ilustración, una edición… va a poder cambiarla?

Parece que las aguas ya se han calmado, pero el mar llevar revuelto seis días. No me quiero ni imaginar la cara del ilustrador y el equipo de trabajo ese día y los sucesivos.

Como ya te he comentado, no es mi portada favorita, ni mi estilo, pero no es un desastre, como algunos quisieron hacer ver. De hecho, pude ver un reels en el que alguien la modificó un poco (cambiando las letras de posición, ampliando la ilustración…) y era una portada que funcionaba. Hay portadas en España de libros del estilo que no varían mucho de la propuesta por Puck. ¿Ha podido quizás el fenómeno fan?

Por aquí nada más. Esta es mi opinión sobre la polémica, tú puedes darme la tuya. Sabes que nos leemos por aquí el domingo que viene. Durante la semana puedes encontrarme en cualquiera de mis redes sociales. ¡Nos vemos!